Son muchas las máquinas, sencillas y complejas que manejamos cada día y el número sigue creciendo pues el mundo está en una constante modernización que a veces hasta asusta. Pero ese no es el punto, el punto es que la mayoría de las veces no nos detenemos ni por un momento o instante a pensar en lo complejo en realidad que son algunas de estas máquinas a las que la verdad no le prestamos atención siempre y cuando se porten como deberían.
En esta ocasión estamos hablando sobre las cerraduras, que estoy seguro que hasta que leíste esto no te habías dado cuenta que en realidad son máquinas bastante complejas con las que lidiamos infinidad de veces al día y sobre las cuales definitivamente vale la pena saber un poco más, así que vamos a ello. pero te aconsejo de igual manera que consultes con http://cerrajeros24hterrassa.es para una optima eleccion.
Erase una vez, en la época de las cuevas y los hombres de las cavernas que las habitaban, que existió un simpático hombre al que llamaremos Crog. Resulta que Crog vivía con su familia, felizmente todos en una cueva muy cómoda. Excepto porque la parte de la cueva reservada para Crog era fría y húmeda y esto obviamente no le gustaba. A parte, estando siempre en casa rodeado de familiares cuestionando tu vida y cada pasos que das, hacían que Crog pensase en irse y comenzar a vivir solo. Hasta que un día se fue, no encontró una cueva y decidió “construir” una.
Su cueva artificial se volvió un éxito, todos la querían. Luego hizo las pases con su familia y se fueron a vivir juntos a la cueva artificial y por un tiempo todo estuvo bien, hasta que Crog se hartó de la falta de privacidad y decidió remediarlo. Ya con las puertas en posición, se le ocurrió colocar un mecanismo para controlar quien habría la puerta y quien no. Muy probablemente utilizó una piedra para detener la puerta en su sitio y esta simple piedra atravesada constituye el ancestro de la idea de las cerraduras.
Claro, hago la advertencia, el Crog aquí descrito es un personaje de ficción, cualquier parecido con alguna persona viva o muerta es pura coincidencia, a parte, en la historia aquí contada, Crog es solo una representación de la idea de la humanidad. Ciertamente no hubo un neandertal llamado Crog que además de inventar las casas construidas y las puertas, también inventó las cerraduras.
Volviendo a Crog (recuerda, la idea abstracta de la humanidad) y su historia un día no le fue suficiente la piedra con la que mantenía la puerta cerrada pues muchos simplemente empujaban un poco y la piedra cedía, necesitaba un mecanismo que instalar en la puerta para que la mantuviese cerrada hasta que Crog, y solo Crog, decidiese que podía abrirla.
Así es como nacieron las cerraduras, por la simple necesidad de mantener nuestras puertas en la posición correcta a donde quiera quien sea su dueño. Hoy en día no podríamos vivir sin ellas, que en mayor o menor grado nos mantienen seguros en un mundo que constantemente coquetea con la inseguridad y los pillos de turno.